Cuando pensamos en fútbol, la imagen de un balón cruzando la línea de gol o el estruendoso grito de un estadio lleno quizás sea lo primero que viene a la mente. Sin embargo, hay un símbolo más perdurable y visible que conecta a generaciones de aficionados y representa el alma de cada equipo: la camiseta. Este es el tema central del “Atlas Mundial de Camisetas, los colores de todas las selecciones de fútbol, la historia, las leyendas y las rarezas”, un libro que reúne a Kune Molinero, Alejandro Turner, Pablo Aro Geraldes, Agustín Martínez y Sebastián Gándara bajo la editorial Planeta. En vísperas del gran evento del Mundial, esta obra llega como un compendio no solo de las batallas deportivas, sino de las historias sociales y políticas que han acompañado a estas prístinas camisetas.
Conversamos con Alejandro Turner, uno de los autores, quien compartió detalles fascinantes sobre cómo este proyecto tomó forma. “Habíamos pensado como que ese era el paso siguiente”, comentó Turner, revelando cómo el impulso de desarrollar un Atlas que recopile las camisetas de elecciones no solo mundialistas surgió casi inmediatamente después de su éxito anterior con camisetas argentinas. Sin embargo, crear un atlas tan extenso presentó sus propios desafíos. “En algunos casos hubo hasta intercambios con embajadas para ya ver cómo era su camiseta”, dijo Turner, al describir los obstáculos para documentar camisetas de países que ni siquiera han jugado partidos oficiales.
Una parte integral del trabajo fue el enlace emocional entre las camisetas y las historias de los países que representaban. Turner destacó cómo “las camisetas van reflejando en algunos casos cambios políticos muy fuertes”, aludiendo a simbologías que marcaron épocas de conflicto, como la esvástica en la camiseta alemana del 38, o la era del fascismo reflejada en las camisetas italianas. Al analizar estos elementos, el libro ve a las camisetas como documentos vivos que cuentan una historia cultural y política en paralelo a la deportiva.
Un detalle significativo que Turner compartió fue la intriga de trabajar con camisetas “limpias” de selecciones, carentes de los omnipresentes logotipos de sponsors que hoy llenan las camisetas de clubes. “Eso es una realeza en el fútbol de hoy”, reflexiona, sosteniendo que las camisetas de las selecciones nacionales, por el momento, han permanecido sin comerciales. Esta pureza no solo atrae la nostalgia de fanáticos, sino que también permite que la camiseta por sí misma cuente su inherente historia.
Por supuesto, el trabajo no se limitó a observar los colores y patrones. Los autores exploraron la historia detrás de cada diseño: “Encontrar la historia de por qué tal camiseta tiene tal color” o “ir contando también esas historias […] más allá de lo que tiene que ver con el diseño”, explicó Turner. Desde la inesperada situación de la selección Francesa usando camisetas del modestísimo Atlético Kimberley durante el Mundial del 78, hasta la histórica camiseta alternativa de Argentina que cobijó el legendario gol de Diego Maradona a Inglaterra en el 86, cada camiseta cuenta algo más que victorias y derrotas; es un portal hacia memorias culturales compartidas.
Asimismo, con el aporte de Pablo Aro Geraldes, otro de los autores, quien Turner describe como “la persona que más sabe de camisetas de selecciones”, el libro se convierte en un homenaje a la obsesión por el detalle y la preservación de estas insignias textiles del fútbol. Con Geraldes como un referente, el libro suplanta cualquier intento en solitario de capturar la riqueza del tema, extendiendo un puente entre la memoria histórica y la iconografía visual.
Un elemento narrativo intrigante está en cómo las camisetas reflejan la historia del coleccionismo en el fútbol. Como mencionó Turner, estamos “en una época de apogeo absoluto del coleccionismo de camisetas”, algo que nos remonta a cómo, tiempo atrás, asistir a los estadios con la camiseta oficial no era la norma. Actualmente, este fenómeno no solo representa la comercialización del fútbol, sino también la manera en que los fanáticos buscan una conexión tangible con sus equipos e ídolos.
El “Atlas Mundial de Camisetas” está diseñado con un enfoque rico en detalles, gracias a los esfuerzos del ilustrador Pablo Engel y el diseñador Álvaro Calderas, ambos responsables de capturar la esencia visual del libro. Turner concluyó exaltando la experiencia de trabajar con ellos, quienes “son fundamentales” para convertir este libro no solo en una compilación de información, sino en una obra de arte en sí misma.
En síntesis, el “Atlas Mundial de Camisetas” se erige como testigo de cómo el fútbol, a través de sus camisetas, se entrelaza con las identidades nacionales y narra épocas de gloria y tribulación. La camiseta es así consagrada como una cápsula de tiempo, lista para ser explorada por los aficionados al deporte y curiosos de la historia por igual. Esta obra se transforma no solo en un objeto de colección, sino en una narrativa completa que cada lector puede experimentar individualmente, estableciendo una conexión única con el legado del fútbol mundial.
