Celebrando la Semana del Teatro Comunitario en todo el país

Celebrando la Semana del Teatro Comunitario en todo el país

Mariano nos cuenta que este festival lleva ya cinco años realizándose y destaca la rica diversidad de actividades disponibles. “Es un festival muy lindo”, expresa, al tiempo que reconoce lo desafiante que resulta llevarlo a cabo a fin de año. Sin embargo, el entusiasmo y la satisfacción parecen predominar en sus palabras. “Estamos muy contentos”, asegura, haciendo referencia a la intensa actividad que acompaña al evento.

El teatro comunitario es una manifestación de arte distinta: “Hablamos de un teatro de vecinos, por vecinos y para los vecinos”, dice Mariano. Esta definición básica encapsula la esencia de su misión: que un grupo de personas se reúna para contar algo significativo a través de la expresión teatral. La propuesta implica no solo una obra, sino una intervención en el espacio público o en lugares específicos como salas o galpones, buscando siempre crear un sentido de pertenencia, identidad barrial y una auténtica fiesta comunitaria.

Este evento no solo tiene un rol recreativo, sino que se conecta profundamente con temas de gran relevancia social. “En estos últimos años hemos ampliado un poco también esa estética para tocar temas más profundos”, menciona Mariano. Los derechos humanos, la desindustrialización, el circo criollo, cuestiones políticas y sociales encuentran aquí un espacio de discusión y reflexión. Es esta la riqueza de un teatro que se alimenta de la vida misma, abarcando temas que afectan a la comunidad y que construyen ciudadanía.

El crecimiento de la Red Nacional de Teatro Comunitario es notable: “A nivel nacional sí hemos ampliado de manera muy significativa la Red en estos 20 años”, explica Mariano. Especialmente después de la crisis del 2001, han surgido muchos grupos en pueblos y ciudades más pequeñas, lo que refuerza la importancia de la comunidad en la construcción de esta forma artística. No obstante, uno de los grandes desafíos sigue siendo hacer que esta práctica se expanda en la ciudad.

Durante la Semana del Teatro Comunitario, son más de 30 las obras que se pueden disfrutar a nivel nacional. “En total con los eventos y con todo son más de 40”, cuenta Mariano, incluyendo conciertos de orquesta, ensayos y talleres abiertos, y muestras de danza comunitaria. En la ciudad, específicamente, 10 grupos están activos ofreciendo obras para el público local.

El carácter inclusivo y accesible de este evento es un rasgo fundamental. Aunque algunos eventos deben cobrar entradas para sostener sus espacios, muchas de las actividades se dan “a la gorra”, lo que facilita que un público amplio pueda participar. Además, se han encontrado fórmulas para amplificar la experiencia, como el uso de plataformas virtuales que permitieron llevar las obras a una audiencia más amplia durante la pandemia.

El perfil de quienes participan en el teatro comunitario es tan variado como la paleta de actividades que despliegan. “Es muy variado, incluso muchos de los que están hace mucho tiempo, sus hijos transitaron el Galpón”, cuenta Mariano. Este traspaso generacional genera una conexión única con el oficio teatral. Además, “gente, la mayoría, trabajadores, residentes, comerciantes” también encuentran aquí su lugar, de manera que el teatro comunitario refleja la diversidad social donde surge.

Para quienes desean sumarse, el teatro comunitario ofrece puertas abiertas. “Cualquiera, si tenga ganas de hacer teatro, puede venir a ver, pero también puede saber que se puede sumar”, invita Mariano, destacando el carácter inclusivo y sin pretensiones de esta expresión artística.

En suma, la Semana del Teatro Comunitario es una celebración de la comunidad a través del arte, una oportunidad para conectarse con otros y con uno mismo, a través de las historias que nos rodean y que nos conforman. Además de los espectáculos, se abren espacios para nuevas relaciones, aprendizajes y, sobre todo, para reconocer la identidad compartida. La Semana del Teatro Comunitario no es solo un evento para ver teatro, es una invitación a ser parte de una comunidad viva y vibrante que transforma su entorno a través del arte.