Críticas a TN y Esperanzas Verdes en Villa Santa Rita: Un Testimonio desde la Ciudad

Críticas a TN y Esperanzas Verdes en Villa Santa Rita: Un Testimonio desde la Ciudad

Nuestro reciente recorrido por las noticias y opiniones relevadas en diferentes medios nos lleva a una combinación de indignación y esperanza. Por un lado, reiteradas críticas a la cobertura de medios de comunicación como TN, y por otro, el avance en proyectos comunitarios que traen consigo un halo de optimismo. En este contexto, se evidencia cómo la lucha vecinal puede fructificar finalmente en políticas concretas, mientras se siguen denunciando injusticias que marcan nuestra realidad urbana.





En primer lugar, destaca el profundo descontento con la forma en que algunos medios de comunicación manejan la información. “TN viene apostando a otra cosa y ciertos dirigentes como Axel Kicillof han hecho una excelente elección y el pueblo los ha elegido,” se afirma en alusión a la postura crítica que mantiene el canal televisivo respecto a ciertos políticos.



Esta actitud, según se resalta, no solo busca “entretener y distraer, sobre todo distraer” sino también torcer el rumbo de las noticias presentadas. La crítica se agudiza al referirse a las burlas dirigidas a figuras públicas. Un ejemplo claro de esto es la imagen de Axel Kicillof disfrazado de payaso que fue utilizada en uno de los programas de TN, un episodio que pone de manifiesto la voluntad del canal de ridiculizar a ciertos dirigentes.



Por otro lado, se celebra un logro vecinal significativo: Villa Santa Rita ha dado un paso adelante en la consecución de su primera plaza. Después de siete meses desde la aprobación de la ley que habilitó la creación del espacio verde, el gobierno de la ciudad notificó oficialmente que había adquirido el lote necesario para esa obra. “El barrio de Villa Santa Rita dio un nuevo paso en la lucha para conseguir su primera plaza,” se afirma con entusiasmo.



Los vecinos y vecinas del barrio han mostrado su satisfacción, aunque insisten en la necesidad de que la licitación para las obras sea adjudicada antes del cambio de gestión de este año. “Ahora, el gobierno de la ciudad notificó a las agrupaciones barriales que ya adquirió el lote en el que se realizará el espacio,” recalcan con la esperanza puesta en la pronta materialización del proyecto.



El lote, en cuestión, ubicado en la avenida Álvarez Jonte del 3200, llevaba décadas en desuso. “Es uno de los cuatro terrenos identificados por el colectivo vecinal como potenciales espacios para desarrollar esta plaza,” se menciona, evidenciando la prolongada búsqueda y lucha vecinal. Los residentes del barrio destacaron que, en marzo de este año, lograron que la legislatura aprobara el proyecto para expropiar ese predio de 1600 metros cuadrados. “Ahora, se convertirán en una plaza para el uso, el disfrute y sobre todo el ejercicio del derecho al espacio público,” subrayan con renovado optimismo.



Pero no todas las noticias son tan alentadoras. Existe un amplio descontento derivado de la actual gestión de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y sus respuestas a las problemáticas educativas. “Los alumnos de distintos colegios secundarios que decidieron tomar sus colegios en protesta por la situación edilicia, por la falta de mantenimiento, por la falta de presupuesto,” han sido objeto de severas sanciones. Las cartas documento dirigidas a las familias de los estudiantes han causado una gran preocupación y molestia entre la comunidad.



Estos jóvenes, que “decidieron tomar los colegios para llamar la atención de un Estado que no los estaba escuchando,” ahora enfrentan multas exorbitantes que deben ser pagadas por sus familias. A esta medida se le critica de forma contundente, considerándola como un atropello a la libertad de expresión. “Nuestro derecho como ciudadanos y ciudadanas a peticionar ante las autoridades de la manera que se vaya creyendo posible y atendible,” se reitera, haciendo hincapié en la violación a derechos constitucionales.



Los estudiantes no solo evidenciaron las carencias mediante la protesta, sino que también se dedicaron a realizar actividades constructivas dentro de los colegios, como talleres y debates, al tiempo que arreglaron y pintaron mobiliarios deteriorados. “Durante los días que persistieron en la toma no solo no dejaron de tener actividades educativas sino que además en los tiempos libres se organizaron para hacer talleres,” se destaca, refutando cualquier imagen que califique su accionar como improductivo o meramente disruptivo.



Finalmente, surge una llamada a la reflexión y al cambio en el contexto político de la ciudad. “Pensemos un poquito la próxima vez que tengamos que votar,” se sugiere, recordando la reciente elección de Jorge Macri como resultado de una democracia que a veces deja perplejos a muchos.



En resumen, la nota revela cómo, en medio de disputas políticas y problemas educativos, la acción vecinal puede generar cambios significativos y concretos. “Buenas noticias que podemos dar,” se concluye, con la firme creencia en el poder de la organización comunitaria para influir en el ámbito público y lograr espacios verdes que beneficien a toda la comunidad.