Conceden Prisión Domiciliaria a Lucas Feijó, Acusado de Arrastrar a su Mujer con un Auto

Conceden Prisión Domiciliaria a Lucas Feijó, Acusado de Arrastrar a su Mujer con un Auto

En un giro sorprendente y controvertido dentro de un caso que ha captado la atención pública, Lucas Feijó, quien se encontraba detenido desde el pasado sábado bajo cargos de tentativa de femicidio tras haber arrastrado a su pareja, Tatiana Ruiz, con su vehículo en el barrio de Flores, fue beneficiado con la prisión domiciliaria. La decisión, tomada por el magistrado a cargo, ha generado indignación y una fuerte reacción de diversos sectores que ven en esto un posible antecedente negativo en los casos de violencia de género.





El juez, al hacer lugar a un planteo de la defensa de Feijó, determinó el cambio de la calificación legal del delito de “tentativa de femicidio” a “lesiones culposas”. Este cambio técnico en la calificación del delito ha permitido que Feijó pueda cumplir su detención en su domicilio en lugar de en una institución carcelaria. Además, se ha ordenado la colocación de una tobillera electrónica y se ha establecido una medida restrictiva de acercamiento a su pareja, Tatiana Ruiz.



Esta decisión judicial ha sido vista con preocupación y desconcierto por el Ministerio Público. Según fuentes judiciales, para el Ministerio hubo una clara “intencionalidad de Feijó en hacerle daño a Tatiana Ruiz”, lo que podría llevar a una apelación de la decisión judicial o, eventualmente, a que la acusación sea derivada a una Fiscalía Especializada en Violencia de Género.



La controversia radica en la percepción de que hubo tanto la “intencionalidad” como la “gravedad del hecho”, los cuales justificarían una imputación más severa que “lesiones culposas”. Diversas organizaciones que luchan contra la violencia de género se han pronunciado en contra de la decisión, enfatizando que actos de esta naturaleza deben ser tratados con el máximo rigor para evitar mensajes equivocados a la sociedad.



El caso ha abierto un debate sobre cómo se manejan judicialmente incidentes de violencia contra la mujer y ha puesto sobre la mesa la necesidad de una formación más profunda en perspectiva de género para quienes administran justicia. Estos episodios subrayan la importancia de las medidas preventivas y correctivas que protejan a las víctimas y hagan justicia de manera ejemplar.



En este contexto, el uso de dispositivos electrónicos como la tobillera y la prohibición de acercamiento son elementos importantes, pero muchas veces considerados insuficientes, ya que el control y monitoreo requeridos para un verdadero cumplimiento de estas medidas suelen presentar falencias. Las fallas en estos sistemas pueden poner en riesgo a las víctimas, quienes muchas veces viven con temor ante la posibilidad de que las prohibiciones sean incumplidas.



Es fundamental recordar que los casos de violencia de género tienen un trasfondo psicológico y emocional profundo. Las víctimas no solo sufren daños físicos, sino también emocional y mentalmente, lo que puede generar secuelas long-lasting. Por ello, el sistema judicial tiene la responsabilidad de proteger a las víctimas de manera eficiente y decidida, asegurando que sus agresores reciban las sanciones correspondientes acorde al daño generado y al peligro que representan.



La situación de Tatiana Ruiz y Lucas Feijó debería servir como un caso emblemático para repensar y mejorar los protocolos de acción ante casos de violencia de género. La decisión del magistrado, aunque legalmente fundada, pone de manifiesto la necesidad de un diálogo más amplio y comprometido sobre cómo la sociedad y el sistema jurídico afrontan estos casos.



La indignación que han expresado distintas organizaciones y colectivos feministas se centra precisamente en la preocupación de que decisiones como esta puedan abrir una brecha en la severidad con la que se tratan los delitos de violencia contra la mujer. Las “lesiones culposas” representan una disminución significativa en la gravedad del delito que se le imputa a Feijó, lo que podría llevar a una pena reducida y, en muchos casos, a una percepción de impunidad.



Se espera que las autoridades correspondientes revisen la situación y tomen decisiones que no solo protejan a la víctima inmediata sino que también envíen una señal fuerte y clara de que la violencia de género no será tolerada bajo ninguna circunstancia en la sociedad. El compromiso con la justicia y la protección de los derechos y la integridad de las mujeres debe ser la prioridad en cualquier resolución de estos casos.



La evolución de este caso será monitoreada de cerca y es probable que las últimas palabras aún no se hayan dicho. El Ministerio Público podría apelar y buscar que se recupere la acusación original de “tentativa de femicidio”, llevando el caso a instancias más altas y posiblemente a una Fiscalía Especializada en Violencia de Género. Mientras tanto, Tatiana Ruiz y otras víctimas de violencia de género continúan esperando justicia y medidas efectivas de protección frente a sus agresores.