Desde el año 2012, el Parque Uriburu ha estado en una situación polémica y desgarradora para los vecinos de Parque Patricios, en Buenos Aires. Según denuncian, el parque, ubicado entre el Hospital Pena y el Hospital Churruca, ha sido ocupado ilegalmente por empresas privadas, comenzando con Techint y actualmente por una empresa denominada “Base”. “Son 10.000 metros cuadrados de parque que están usurpados, de un total de más o menos 30.000 metros cuadrados, o sea un tercio del parque,” menciona Federico, uno de los vecinos afectados.
Un Parque Tomado por Privados
La historia de esta ocupación comenzó hace 12 años, con la construcción de la línea H del subte. En ese momento, se instaló un obrador con la promesa de prolongar la línea. Sin embargo, las obras no avanzaron más allá de la estación actual, y el parque quedó convertido en un depósito en lugar de ser devuelto a los ciudadanos. **”Colocaron un obrador con la excusa del subte en su momento, en el año 2012, y nunca lo sacaron… ahora lo están usando prácticamente de depósito,”** relata Federico.
Incompetencia y Falta de Respuestas
Los vecinos han buscado respuestas por parte de las autoridades, pero se han encontrado con la inacción y la indiferencia de la Comuna y del gobierno de la ciudad. Además de no recibir información oficial, las respuestas que han conseguido resultan insatisfactorias y poco serias. **”La comuna no nos respondió nada, se declaró incompetente en el pedido de informe, y la presidenta de la Junta Comunal respondió por las redes sociales diciendo que tranqui, ya estamos ocupando el asunto,”** explica Federico con evidente frustración.
La empresa Base, por su parte, justifica la ocupación afirmando que están realizando tareas de diseño y planificación para la extensión del subte. No obstante, los vecinos consideran estas justificaciones como absurdas. “Para diseñar un subte no necesitas un parque entero, necesitas una oficina… es poco seria la respuesta,” comenta con escepticismo Federico.
Estado de Abandono y Desesperanza
La ocupación no solo ha afectado la disponibilidad del parque, sino que además ha provocado su deterioro. “La parte que no está usurpada por Techint está en un estado de abandono total, o sea, está hecho un basural, se prenden fuego todos los árboles, los monumentos fueron vandalizados,” lamenta Federico. En un intento por visibilizar la problemática, los vecinos han organizado festivales y actividades comunitarias, incluyendo la realización de un mural con la leyenda “Devuelvan el parque”.
Iniciativas Legislativas y la Necesidad de Reconocimiento
Aunque el parque ha sido oficialmente reconocido como tal desde 1914, no está categorizado bajo la denominación de “urbanización parque”, lo que facilita su uso indebido. En un esfuerzo por cambiar esto, la diputada Cele Fierro ha presentado un proyecto de ley para garantizar su estatus y protegerlo de futuros abusos. “Es inentendible que no esté como urbanización parque, porque desde 1914 hay un acta que lo declara como parque y toda la vida fue un parque, menos los últimos 12 años,” señala Federico.
Llamado a la Acción: Recuperar el Parque Uriburu
La lucha por el Parque Uriburu no es solo una pelea por un espacio físico, sino también por el derecho de la comunidad a disfrutar de sus espacios verdes. Los vecinos están determinados a devolverle su propósito original y liberar el área de manos privadas que lo han usurpado para fines que no benefician en absoluto a la comunidad. “Lo único que queremos es que devuelvan el parque,” asevera Federico, expresó con notable pasión.
Para los ciudadanos interesados en apoyar esta causa, se ha abierto una plataforma de comunicación donde no solo los vecinos de Parque Patricios pueden participar, sino también aquellos de otras áreas que enfrentan problemas similares. “Quizás hay otros parques en la ciudad, u otro tipo de terrenos también intrusados por empresas, y hay quizás vecinos que necesitan una mano para organizarse,” comparte Federico, enfatizando la importancia de la unidad y el apoyo colectivo.
En conclusión, el caso del Parque Uriburu es un claro ejemplo de cómo la inacción y la indiferencia pueden llevar al deterioro de espacios públicos esenciales. La lucha incansable de sus vecinos por recuperar el parque sirve como inspiración para muchas otras comunidades afectadas por situaciones similares. La esperanza es que, con presión y visibilidad, se logre devolver este valioso espacio verde a quienes realmente le pertenece: la gente.
