La situación actual en Argentina, según Giuliani, no se trata de una falta de trabajo, sino más bien de una carencia de empleo digno. “El problema en Argentina no es una falta de trabajo, el problema en Argentina en todo caso es falta de empleo, porque trabajo hay y de sobra”, afirmó, subrayando que el verdadero desafío radica en generar empleo y garantizar que el trabajo realizado sea adecuadamente reconocido y remunerado. Giuliani enfatiza que, bajo el gobierno actual, se ha producido “un ataque brutal” a un amplio colectivo de trabajadores, con recortes significativos en la implementación de programas esenciales, afectando directamente a las bases de la economía social y solidaria.
El núcleo de la protesta radica en la desvinculación del salario social complementario del salario mínimo vital y móvil, lo que ha llevado a que muchos trabajadores se encuentren con ingresos insuficientes. Actualmente, según datos de la FENAT, un trabajador percibe apenas 78 mil pesos, una suma que Giuliani considera inadecuada para sostener una vida digna. “Estamos hartos de discutir la pobreza… no queremos discutir más la pobreza, sino que queremos discutir la riqueza”, declaró, haciendo un llamado a cambiar el enfoque del discurso público y político.
Giuliani también denunció un clima hostil hacia las organizaciones sociales y los medios de comunicación, señalando un “avance muy profundo de la derecha”, que según él, pretende debilitar pilares fundamentales de la sociedad argentina como la educación y la salud pública. “Vinieron a terminar de destruir lo que históricamente la Argentina ha estado”, comentó, refiriéndose a lo que percibe como un intento de desmantelamiento de las conquistas sociales logradas con esfuerzo a través de los años.
Uno de los aspectos más polémicos de la conversación con Giuliani fue su crítica al gobierno en términos de colonialismo económico y entrega de recursos naturales. Al referirse a la rica producción agrícola y minera del país, como el reciente descubrimiento de un importante yacimiento de cobre y las operaciones en Vaca Muerta, subrayó la desigualdad y la falta de soberanía en la gestión de estos recursos. “Discutir el hambre tiene que ver… no, nosotros tenemos en manos de quienes está la riqueza en nuestro país”, afirmó, instando a un replanteamiento sobre quién controla los medios de producción y cómo se distribuyen los beneficios derivados de ellos.
Un punto crítico del análisis de Giuliani fue la reciente decisión de bajar la edad de punibilidad a los 14 años, asociándolo con lo que describe como “políticas de exterminio” que afectan de manera desproporcionada a la juventud empobrecida del país. Para él, la propuesta es emblemática de un gobierno que responde al hambre con medidas represivas en lugar de soluciones integrales.
“Estamos ante una situación de cambio político… donde nosotros y nosotras, como trabajadores y trabajadoras, estamos organizados, tenemos que tomar noción del daño estructural que caracteriza”. Con esta declaración, Giuliani apela a una toma de conciencia colectiva sobre el momento histórico en el que se encuentra el país, destacando la importancia de la unidad en la lucha por los derechos laborales y sociales.
Este viernes, la concentración frente a la Secretaría de Trabajo se prevé multitudinaria, con una convocatoria que habla de la creciente frustración y el deseo de cambio de amplios sectores de la sociedad. “Va a ser a las 11 de la mañana, ahí en Alén, en la puerta, lo que era el ministerio rebajado”, informó, invitando a todos aquellos comprometidos con la causa a unirse a esta expresión pública de descontento y búsqueda de justicia.
La manifestación en Buenos Aires este viernes será, sin duda, un momento clave para entender las tensiones inherentes a la política actual y el clamor por un enfoque renovado que priorice equidad, justicia y una verdadera redistribución de la riqueza en Argentina. Giuliani y las organizaciones convocantes esperan que este evento no solo sea una demostración de fuerza, sino también un catalizador para el cambio que muchos sienten es necesario y urgente.
