Un Sueño Hecho Realidad
El Museo Argentino del Títere encuentra sus raíces en el deseo apasionado de Mane Bernardo y Sara Bianchi, dos mujeres visionarias que deseaban crear un lugar para compartir y celebrar la magia de los títeres. Guillermo Farisco, vicepresidente del museo, relata que “con la gran cantidad de títeres que Bernardo y Bianchi habían recolectado a lo largo de sus viajes”, decidieron comenzar un museo que inicialmente fue itinerante, hasta encontrar su hogar permanente en 1995, en la casa histórica de la familia Mármol.
El museo no solo ofrece una vasta colección de piezas, sino que también alberga una sala dedicada a presentaciones y eventos. La sala Federico García Lorca se centra en la esencia del títere: “el títer tiene que ser si está vivo”, afirma Guillermo. Durante todo el año, los fines de semana, el museo presenta funciones de títeres con artistas de renombre, permitiendo al público experimentar la magia del espectáculo titiritil en su forma más auténtica.
La Tradición y Evolución del Títere
El museo es una pequeña cápsula del tiempo que lleva a los visitantes a un viaje a través de la rica historia del títere. Con piezas que datan del siglo XVIII, como los Pupi Sicilianis, estos títeres forman parte del legado cultural de Sicilia y ahora se encuentran en exhibición en Buenos Aires. Sin embargo, no todos los títeres son meras piezas de museo; muchos son también ejemplos vivos de arte en movimiento, un recordatorio de que “los títeres no solo se ven, sino que viven y respiran gracias a la habilidad del titiritero”.
El arte del títere, como explica Guillermo, es complejo y multifacético, combinando elementos de artes visuales y escénicas. “El titiritero de formación hace sus propios muñecos. Y además tiene que ser actor”, destaca Guillermo, resumiendo la meticulosa habilidad y paciencia requerida para dominar esta antigua forma de arte.
Un Espacio de Aprendizaje e Interacción
Más que un simple museo, el Museo Argentino del Títere también sirve como un centro educativo. Ofrecen una variedad de talleres que son populares entre personas de todas las edades, especialmente adultos que deciden explorar el mundo titiritesco más adelante en sus vidas. Aunque no han tenido gran éxito con talleres infantiles debido a la necesidad de que estos sean acompañados por adultos, el museo colabora con otros institutos como el Instituto Vocacional de Arte para ofrecer clases de títeres para los más pequeños.
Los talleres son más que simples lecciones de manipulación de títeres; actúan como medios terapéuticos, ayudando a los participantes a “poner en el títere cosas que por ahí no se animan a decir o a expresar desde vos mismo”. Esta transferencia emocional y expresiva convierte al títere en algo más que un objeto de entretenimiento, lo transforma en un aliado en el desarrollo personal y emocional.
Un Puente Cultural
Guillermo asegura que aunque el Museo Argentino del Títere es único en su clase dentro de Buenos Aires, también se mantienen “relacionados con otros lugares en todos los países”, reforzando la comunidad internacional de titiriteros. Participan en festivales en Colombia, México y otras partes del mundo, llevando su arte más allá de las fronteras argentinas. Estas colaboraciones y participaciones internacionales destacan la universalidad y el alcance del arte de los títeres, uniendo a personas de todos los rincones del globo a través de historias contadas con marionetas.
Conectando con el Museo
Para aquellos interesados en realizar una visita o participar en las actividades del museo, el Museo Argentino del Títere mantiene una presencia activa en redes sociales. Los interesados pueden encontrar información adicional a través de su página de Facebook y su cuenta de Instagram, donde es posible comunicarse directamente. Este contacto directo con el público no solo ayuda a difundir la cultura del títere, sino que también invita a una interacción más cercana y personal con esta fascinante disciplina artística.
Aunque el museo cierra sus puertas durante los meses de diciembre y enero, su programación y actividades continúan durante el resto del año, brindando a los visitantes la oportunidad de explorar un mundo que fusiona tradición con modernidad, arte con expresión personal.
En conclusión, el Museo Argentino del Títere en San Telmo no es solo un repositorio de muñecos, sino un vibrante centro de cultura, historia y expresión artística. Une personas, tradiciones y disciplinas, trayendo la magia de los títeres a la vida en un constante diálogo entre pasado y presente, entre lo local y lo global. Si buscas experimentar un arte que te sorprenda y te entusiasme, el Museo Argentino del Títere te está esperando.