La historia emergió cuando una diputada de Unión por la Patria reveló esta situación al público. Marcelo Del Casale, de la agrupación Construyendo la Unidad de A.T.E. en el Hospital Garrahan, expresó su enérgico repudio hacia las acciones del Consejo de Administración, describiéndolo como “la política del gobierno de Milley, y en este caso de Caputo”. El Consejo había negado previamente la disponibilidad de fondos para mejorar los sueldos del personal o invertir en el mantenimiento esencial del hospital. Solo tras las denuncias públicas decidieron emitir bonos al personal, destacando Del Casale que se otorgaron “cuatro bonos discriminativos, porque se otorga más a lo que más ganan y menos a lo que menos ganan”.
La Ruta del Dinero: Una Investigación en Curso
Lo que sigue en esta narrativa es una sospecha y especulación sobre el destino de este dinero. Las acusaciones van más allá de meras suposiciones, sugiriendo que los directivos del hospital estaban “comiéndose los intereses” de estos fondos destinados a las obras sociales, en lugar de utilizarlos para mejorar las condiciones laborales y el funcionamiento del hospital. Del Casale se cuestiona si podría tratarse de “la ruta de otros miserables que componen la dirección del hospital Garrahan”.
El nivel de frustración es palpable entre el personal, incluidos los médicos que han considerado la renuncia debido a estas condiciones adversas. Del Casale enfatiza: “Esto es una indignación que realmente está pasada a los límites”, subrayando el sentimiento de traición y abandono por parte de las autoridades. Hay un consenso general de que el Consejo de Administración no actúa de manera independiente, sino que es un “brazo ejecutor de la política del gobierno”.
Movilización y Lucha por una Ley de Emergencia Pediátrica
En respuesta, los trabajadores del Hospital Garrahan han planificado manifestaciones y paros para visibilizar esta situación. Un paro de 48 horas ya tuvo lugar la semana pasada, y se espera que la movilización continúe con otro paro y marcha hacia el Congreso para presionar por la Ley de Emergencia Pediátrica. “Nosotros sospechamos que esto no es idea del Consejo de Administración. Es parte de la política de este gobierno que tenemos”, asegura Del Casale, destacando la necesidad de luchar no solo por salarios justos, sino también por la preservación de la salud pública.
El futuro de esta ley en el Congreso es incierto. Del Casale comenta que “nos ha llegado indicios que sería favorable”, pero llama a la cautela ya que hay una desconfianza generalizada hacia que el gobierno actual implemente efectivamente cualquier decisión legislativa. “Este gobierno aparte de cruel es anticonstitucional, autoritario y antidemocrático porque no está cumpliendo la ley de discapacitados en este momento”, expresa con visible frustración.
Un Llamado a la Acción
Esta serie de eventos no solo han exacerbado la indignación entre el personal del hospital, sino que también ha encendido un debate nacional sobre la gestión de los servicios públicos y la transparencia en el uso de fondos públicos. El Hospital Garrahan, un reconocido centro de atención pediátrica a nivel latinoamericano y mundial, está en el centro de la tormenta. La acusación de que se han retenido fondos destinados a mejorar el sistema de salud infantil del país ha llevado esta controversia a implicaciones éticas y morales.
Del Casale concluye su llamado con un mensaje a los senadores: “Esperamos que voten, vetando el veto, que la ley de emergencia pediátrica sea ley”. Resalta la importancia de demostrar unidad y resistencia no solo dentro de la comunidad hospitalaria, sino también entre los ciudadanos, para “seguir defendiendo con toda nuestra fuerza el Hospital Garrahan y toda la salud pública en su conjunto”.
Mientras tanto, el hospital se prepara para más medidas de presión, mostrando una resistencia inquebrantable frente a lo que consideran una gestión ineficaz y corrupta. Este conflicto no solo desafía la gestión actual del Hospital Garrahan, sino que plantea preguntas esenciales sobre la dirección de las políticas públicas en un momento crítico para Argentina.

