El precio de la desigualdad en Buenos Aires

El precio de la desigualdad en Buenos Aires

La falta de escrúpulos domina el gobierno de la CABA, desde Néstor Grindetti a los mandatarios de Juntos por el Cambio.

En nuestra Ciudad Autónoma de Buenos Aires, quienes nos gobiernan parecen carecer de escrúpulos. El jefe de gabinete, Néstor Grindetti, proveniente del partido de Lanús y con un historial de intervención en el Club Independiente, recientemente rindió cuentas en la legislatura porteña sobre los primeros seis meses de gestión de la ciudad. Durante su exposición, reclamó a la Corte Suprema por los fondos de coparticipación, prometió mejoras en educación e hizo referencia a diversas inversiones. Además, aseguró que no tolerarán la delincuencia extranjera. Sin embargo, estas declaraciones parecen ser más cortinas de humo que soluciones efectivas.

Desde hace casi veinte años, el PRO gobierna Buenos Aires, utilizando la ciudad como un laboratorio de políticas de derecha. A pesar de las promesas de cambio y progreso, la realidad de la capital más rica de Argentina sigue siendo la misma: una ciudad profundamente desigual.

Esta edición especial busca desmenuzar las palabras y acciones de Néstor Grindetti y el gobierno actual, a cargo de Juntos por el Cambio y la Fundación Pensar. Nos planteamos las preguntas fundamentales: ¿Quiénes son estos gobernantes y para quién están realmente gobernando?

Para profundizar en este análisis, contaremos con la participación destacada de María Eva Koutsoubitis, quien nos ayudará a entender mejor el estado de la ciudad y cómo las decisiones políticas afectan la vida de quienes residen y trabajan en Buenos Aires. Desde aquí, exploramos estas cuestiones que nos afectan a todos y todas, poniendo en evidencia el desprecio de los gobernantes hacia quienes sostienen la cadena económica de la ciudad.

Porque en la ciudad más rica y desigual del país, las promesas ya no son suficientes. Necesitamos acciones concretas y gobiernos que realmente se preocupen por el bienestar de todos sus ciudadanos.